Los insecticidas de contacto y ambientales que se emplean son suministrados por proveedores habituales, están registrados en el Ministerio de Sanidad y Consumo, e inscritos en el Registro de Plaguicidas y/o biocidas de la D.G.S.P
Se lleva a cabo mediante la transformación del insecticida en microniebla mediante pulverización manual a presión, rociando pisos, zócalos y otras zonas de los lugares por donde circulan o habitan las cucarachas, lepismas, hormigas y otros insectos arrastrantes o corredores, realizándose los tratamientos anuales que se consideren necesarios, que pudieran ser cada tres meses, pero siempre dependiendo de las circunstancias del local a tratar.
En algunas circunstancias será necesario el empleo de gel, producto especialmente indicado para aplicar en áreas sensibles como es en las proximidades de equipos eléctricos o electrónicos, viviendas, etc.
El método consiste en la transformación del insecticida en microniebla húmeda mediante nebulizador eléctrico, rociando paredes y techos de los lugares de hábitat o expuestos a la presencia de insectos voladores. Así mismo, se utiliza termonebulizador, que transforma el insecticida en humo, consiguiéndose en estos casos un efecto más rápido.
En algunos casos, será necesaria la utilización de insecticidas en formato de “descarga total”.
El miedo a la opinión que la gente pueda tener de nosotros si reconocemos que en nuestra vivienda existe un problema de cucarachas, nos hace en muchas ocasiones ocultarlo y no tomar las medidas adecuadas. Nada más lejos de la realidad.
Cuando empiezan a aparecer estos insectos en determinadas zonas de las casas (cocinas y baños principalmente) puede ser suficiente con la aplicación de insecticidas ó trampas de uso doméstico que podemos adquirir en cualquier droguería o gran superficie, pero a veces no es suficiente y el problema crece hasta límites insospechados, momento en el cual se hace necesaria la intervención de profesionales que, en la mayoría de los casos, no interfiere nuestra vida cotidiana.
Normalmente NO ES NECESARIO DESALOJAR LA VIVIENDA NI VACIAR MUEBLES, ARMARIOS, etc.